Termina una de las peores semanas para los mercados bursátiles en meses, aunque ya nos estamos acostumbrando a las caídas y los desplomes. Los que estaban pensando que lo peor de la crisis financiera había pasado, quedaron fuera de juego. El jueves pasado fue particularmente “negro”: todos los mercados mundiales cerraron con fuertes caídas. ¿Pero que hizo que se desplomaran los indicadores? No hubo una sola razón, sino una combinación de varias.
La primera: el mundo financiero cree que si la Reserva Federal de Estados Unidos sigue manteniendo como lo hizo los tipos de interés tan por debajo que el Banco Central Europeo, la moneda norteamericana seguirá débil y de esta manera estimulará la suba de los valores de las materias primas.
Otra de las razones es la disparada del petróleo, que a su vez está estimulada por la debilidad del dólar. Esto incrementa las perspectivas inflacionarias de todo el mundo. Con respecto a esto, contribuyó las declaraciones del presidente de la OPEP, que dijo que el valor del petróleo “seguramente” se situará entre 150 y 170 dólares el barril “durante los próximos meses”.
También sumó para esta caída los informes negativos que emitió Goldman Sachs, uno de los mayores bancos de inversión del mundo, sobre algunas entidades bancarias como Citibank y Bank of America, cuyas acciones cayeron más del 6% el jueves negro, y sobre el gigante automotor General Motors, que bajó un 10%.
Europa no pudo quedar exenta del descalabro: sufrió por el efecto contagio de Wall Street y porque, al avizorarse que el periodo del euro fuerte parece extenderse, hay temores que se contraigan las economías de los países que integran la Unión, que son cada vez menos competitivos en términos de tipo de cambio.
Para resumir: una combinación de malas noticias acerca de los bancos estadounidenses, repercusiones de la política monetaria de las autoridades de ese páis (que impactan en los precios de las materias primas) y ensombrecedoras perspectivas con el petróleo hicieron de un jueves común en uno de los más negros de la historia para los mercados bursátiles del mundo.
Fuente: clarín.com