Nos encontramos ante un tipo de fondo de inversión cuyo objetivo es conservar la mayor parte posible, o incluso la cantidad total, de la primera inversión realizada. Si nos interesa realizar su contratación, primero debemos informarnos para saber si es realmente el producto que buscamos o no.
Para empezar, podemos distinguir entre dos fondos de inversión garantizados diferentes. Por un lado, nos encontramos con el fondo garantizado de renta fija, un tipo de fondo de inversión en el que una vez que se alcanza la fecha de vencimiento, se asegura la total conservación del capital inicial, así como también se asegura una rentabilidad fija y predeterminada.
En segundo lugar, se encuentran los fondos garantizados de a vencimiento. Se trata de un tipo de fondos de inversión a través del cual se asegura, por supuesto, la inversión inicial una vez que se alcanza la fecha de vencimiento. Pero, no sólo nos ofrecen esto, sino que también nos dan la oportunidad de obtener una rentabilidad vinculada al comportamiento de una serie de activos financieros o índices.
No obstante, para que podamos obtener dicha rentabilidad, el producto vinculado debe tener una buena evolución. Si no, lo más probable es que esa rentabilidad desaparezca, algo que realmente es lógico si el producto financiero no da los resultados esperados.
Como inversores, nos encontramos en la obligación de estar pendientes respecto a la fecha de vencimiento que tenga nuestro fondo de inversión asegurado. Por norma general, dicha fecha ya viene indicada en el folleto del fondo, así como en la información que recibiremos de manera periódica sobre él. La fecha de vencimiento es muy importante, puesto que se trata de un momento crucial en el que debemos tomar una decisión respecto al fondo.
Normalmente, cuando se alcanza la fecha de vencimiento de la garantía de estos fondos, se inicia un nuevo periodo de garantía que cambia en relación al anterior por su naturaleza o incluso su denominación. También puede ocurrir que el fondo deje de estar garantizado, pero que a pesar de ello funcione de manera correcta, haciendo uso de otro tipo de política de inversión. Es importante destacar que todos los cambios que se realicen en nuestro fondo de inversión garantizado se nos comunicarán a medida que se acerque la fecha de vencimiento de la garantía.
Una vez que el inversor es consciente de los nuevos cambios que se pueden realizar sobre su fondo, dispone de varias opciones entre las que elegir. Puede rechazar las nuevas condiciones que la entidad pretende ofrecerle. Si se toma esta decisión, el partícipe debe ejercer el derecho de separación, a través del cual puede recuperar su inversión, o bien traspasarla a otro tipo de fondo. Dispondrá de un periodo de tiempo limitado en el que no se le aplicarán comisiones de reembolso.
También puede permanecer en el fondo como partícipe. En este caso, el inversor no debe realizar ningún tipo de acción, ya que se muestra conforme con las nuevas condiciones y el fondo contratado se mantiene vigente. Por otro lado, puede renovar en un nuevo fondo con el objetivo de conseguir rentabilidad, y éste podrá ser garantizado o no.
Hay que tener en cuenta que los fondos garantizados realmente no asegura nuestra inversión en todo momento, sino sólamente cuando se cumple con el vencimiento de la garantía.