Los fondos de pensiones registraron una rentabilidad anual negativa, del -2,9% hasta mayo, principalmente por la caída de los fondos de renta variable euro, que perdieron el 33,1% y los de renta variable no euro, que retrocedieron un 27%.
Si bien la rentabilidad anualizada sigue siendo negativa, al menos la rentabilidad correspondiente al mes de mayo fue positiva en un 1,3%. Esto logra que, en lo que va del año, los planes de pensiones recuperen un 4,5%. A pesar de este buen rendimiento, no alcanza para contrarrestar las cuantiosas pérdidas del año pasado.
Por categorías de planes, los de renta variable euro se revalorizaron un 5,3% en mayo, mientras que fuera de la zona Euro las subidas han sido más suavizadas debido a la evolución de la divisa, obteniendo una rentabilidad positiva en el mes del 0,9%. Los activos de renta fija, en cambio, tuvieron una rentabilidad negativa del 0,6%, después de diez meses de rentabilidades positivas.