Recientemente se han realizado modificaciones en la normativa que permites a las Sicav (sociedades de inversión de capital variable) dejar de invertir mayoritaria mente en fondos de inversión.
Este cambio en la normativa permite que las Sicav puedan optar por una gestión más flexible donde prime la inversión directa en bonos y acciones, dado que la industria de los fondos se ha visto desprestigiada por escándalos como el del estafador Bernard Madoff.
Hasta este momento ya cerca de 200 Sicav han modificado su política de inversión, para dejar de invertir la mitad de su patrimonio en fondos. Estas sociedades eran las antiguas Sicav de fondos, una figura que desapareció con el reglamento de 2005 que desarrolla la Ley de Instituciones de Inversión Colectiva y su modificación en 2007.
Lo que sucede es que una Sicav de fondos hay que tener como minimo un 50% invertido en fondos, lo que en circunstancias de mercado puede no ser lo más adecuado para el gestor. Aunque, si existe una Sicav de valores se puede invertir en fondos, pero a conveniencia. La única diferencia es de tipo fiscal, ya que en las instituciones de inversión colectiva de fondos no hay retención en las plusvalías dentro de la sociedad. La nueva legislación permite evitar la retención cuando se invierte más de un 10% en fondos, con lo que amplía el margen de actuación.
Esta decisión de flexibilizar la inversión no es sólo de los grandes patrimonios, sino también de las gestoras de esas Sicav.