Los movimientos de precio que han manifestado el oro durante el primer semestre del año (y el comienzo del segundo) hacen que muchos inversores estén volviendo la vista a esta materia prima tan valiosa, y, por supuesto, también a los fondos de inversión especializadas.
La elección de la inversión en oro no es casual. Estamos ante una materia prima que a lo largo de la historia ha mostrado su potencial de revalorización, pero también, los suficientes movimientos de precio como para convertirse en interesante en la búsqueda de rentabilidad.
Por qué invertirnos en oro
La inversión en oro tiene componentes muy diversos, en algunos casos incluso más allá de la propia rentabilidad esperada.
Hay un componente que tiene que ver con el sesgo de seguridad. No en vano, el oro se ha considerado históricamente un modelo de inversión fiable, seguro y, a largo plazo rentable. Recordemos que las economías mundiales se respaldaron en oro a lo largo de la historia. Es decir, tiene una imagen positiva muy clara y definida.
Por otro lado, diferencia de otros modelos de inversión, el oro tiene una doble vertiente muy interesante. Por un lado, es una materia prima especulativa, podemos invertir en oro exclusivamente desde ese punto de vista y, de hecho, en la compraventa de oro físico, la vertiente especulativa es muy importante. Pero también, el oro tiene un importante uso industrial, y, un no menos importante uso comercial a través de la transformación en la joyería.
Por último, aunque podríamos añadir más valores, como por ejemplo el hecho no guardar habitualmente correlación con los movimientos de mercado, lo cual lo protege en momentos malos, citaremos un valor muy apreciable de la inversión en oro: la liquidez. Es probablemente una de las inversiones más líquidas y más fácilmente convertibles de manera directa. Desde luego, dentro de las materias primas al alcance del usuario, probablemente la de mayor liquidez.
Qué fondos de inversión en oro se están comportando mejor
Lo primero que señalar que es que quedan lejanos los tiempos (sin embargo, nota lejanos) en los que algún fondo de inversión en oro lograba batir un récord tras otro con rentabilidades en algunos casos cercanas al 200%. Hoy en día esto no existe, no se da y no se espera. Sin embargo, tampoco impide que encontramos en el mercado fondos indexados o especializados que presenten rentabilidades interesantes. Por poner algún ejemplo, Jupiter Gold & Silver Fund cerraba 2020 con rentabilidades por encima del 20% o DJE – Gold & Ressourcen XP antes de cerrar este primer semestre de 2021 presentaba rentabilidades superiores a 9%.
Lo interesante para el inversor es el análisis del modelo de fondo que más le interesa. Vamos a encontrar desde fondos muy centrados en el oro físico, muy dependientes de los movimientos de precio, y otros fondos más centrados en las industrias directas o indirectas relacionadas con el oro, obviamente afectados por el precio del oro, pero, a la vez, también afectados y beneficiados por los movimientos de mercado.
Lo cierto es que lo más adecuado, sobre todo si no se tiene conocimiento sobre el comportamiento del oro y su industria, es como de costumbre acudir a los profesionales. Afortunadamente hoy en día en el catálogo de prácticamente todos los comercializadores de fondos, vamos a encontrar diferentes perfiles de fondo de inversión en oro. Dejarse aconsejar y revisar las condiciones particulares de cada fondo tratando de entender su funcionamiento y se adapta a nosotros oro, es la mejor idea para una inversión que, desde luego, para lo que resta de 2021 apunta a ser interesante.