Según datos de Inverco, la categoría de fondos de inversión de retorno absoluto se ha convertido en la quinta que más crece en suscripciones netas en lo que va de este año 2009.
De esta forma, estos fondos ya suponen el 2,77% del patrimonio total de los fondos de inversión, con 4.389 millones de euros. Lo que sucede es que los inversores prefieren invertir en productos más flexibles antes de asumir un riesgo adicional como sucede con los fondos de renta variable puros, y con los fondos garantizados de renta variable.
Los expertos señalan que es un buen momento para la rentabilidad absoluta por el valor que todavía ofrece la renta variable y ante la ausencia de rentabilidad en otros activos de menor riesgo, tales como los depósitos o la deuda pública.
En cuanto a las rentabilidades, muchos de los fondos de inversión de esta categoría obtuvieron rentabilidades de más de dos dígitos, donde cinco de ellos se encuentran por encima del 30% de retorno en lo que llevamos de 2009. Un ejemplo de ello es el Okavango Delta, de Abante Asesores, el cual supera ya el 47% de rentabilidad anual.
Es que los fondos de inversión de retorno absoluto habrían aprovechado la fuerte subida de las bolsas desde máximos (más del 60% en el Ibex 35) al tiempo que ofrecería una cobertura razonable en caso de que se produjera la corrección.
Así mismo, los expertos señalan que estas rentabilidades por encima del 40% en los fondos de retorno absoluto son “imposibles de repetir”, y destacan que se trata de productos que “vienen desde muy abajo”. Un objetivo más real en estos fondos son rentabilidades de entre un 5% y un 7% anual.