Si el 2007 fue un gran año para los fondos de cobertura que se negocian en Wall Street, este primer semestre de 2008 no cerró nada mal para los inversores en estos productos. En general, los fondos de cobertura están dando más y más beneficios.
Principalmente, los grandes ganadores fueron aquellos fondos que apostaron a las desgracias de la banca o a las revalorizaciones de los commodities. No es una sorpresa que los inversionistas que apostaron en contra de las inversiones hipotecarias y de viviendas estén destacándose, ya que los problemas en el sector inmobiliario de Estados Unidos y otras regiones del mundo se han desbarrancado en 2008. El desafío real para los gerentes de estos fondos será entregar desempeños similares cuando esa estrategia haya llegado a su fin. Aunque todavía no se avizora un cambio de tendencia.
Extender una buena racha significa mucho para las gestoras, especialmente en fondos más pequeños. No sólo habrá inversionistas felices, sino que una racha exitosa ayuda a atraer grandes sumas de dinero de inversionistas institucionales que exigen un historial de desempeño positivo. Los gestores que siguen sobresaliendo en estos agitados mercados podrían surgir como la próxima generación de superestrellas de los fondos de cobertura.
Para graficar el verano que están viviendo estos fondos, les dejo aquí algunos datos:
- El Fondo Clarium Capital Management de Peter Thiel, que aumentó más de 40% en 2007, ha subido más de 50% este año.
- El Short Credit Fund de Andrew Lahde, que se disparó 886% el año pasado, está cerca de 10% en alza.
- Paulson & Co., que obtuvo ganancias de casi US$15.000 millones el año pasado, ha registrado un alza de casi 20% en algunos de sus fondos de cobertura hasta el 30 de junio
- El fondo Harbinger Capital Partners I, que acumuló ganancias de aproximadamente 120% en su mayor fondo de cobertura en 2007, tuvo una ganancia de 42% hasta junio.
Y la lista sigue. Las ganancias en 2007 fueron más extremas porque muchos de estos inversionistas usaban dinero prestado para hacer grandes apuestas contra las inversiones relacionadas a las hipotecas que colapsaron. A esto, en la jerga bursátil, se lo denomina apalancamiento: una inversión de 1 euro puede transformarse en 10 euros de acuerdo al nivel de apalancamiento que le imprime el gestor del fondo.
En cuanto a lo que sucederá este año, algunos gestores esperan que el mercado empeore antes de que mejore, a pesar del reciente vigor de las acciones. Son especialmente pesimistas sobre el sector financiero. Algunos creen también que las compañías que se benefician de los mercados emergentes volverán a la carga.
¿Qué sucederá? En la ciencia económica todo es posible…
Fuente: The Wall Street Journal