Tras el temor sobre un importante aumento de la rentabilidad de los bonos gubernamentales de Reino Unido y EEUU, o de los tipos de interés, varios fondos de renta fija que invierten en este tipo de bonos están recortando su exposición a ellos.
Este temor tiene como consecuencia la inquietud de los mercados sobre las finanzas públicas, lo que puede traducirse de forma inmediata en el encarecimiento de las hipotecas y de los créditos de las empresas.
Con lo cual a medida que se incremente la rentabilidad, el precio de los bonos disminuye, causando una devaluación de las inversiones de los fondos que invierten en los bonos de EEUU y Reino Unido.
Varios de los grandes fondos de bonos de todo el mundo han advertido sobre las consecuencias de una venta masiva de estos bonos, aunque en contraposición las gestoras de bonos son un tanto mas optimistas sobre los mercados de la eurozona porque los programas de ayuda del Banco Central Europeo han sido menos agresivos y las expectativas inflacionistas son menores que en otras zonas.
Tal es así, que durante el pasado mes de diciembre, la desconfianza ante los bonos de estas dos economías ha provocado que su rentabilidad suba a un ritmo mayor que la de los bonos alemanes, siendo que la de los bonos de EEUU a diez años ha subido 63 puntos básicos hasta el 3,83% desde el 30 de noviembre de 2009, mientras que en Reino Unido, el aumento ha sido de 44 puntos básicos hasta el 3,96%.