Según declaran diversos medios periódisticos, entre los que se destaca Libertad Digital, de donde hemos extraído esta información, la caja catalana Caixa Catalunya se encuentra en una situación financiera muy complicada.
El medio referencia declaraciones del consejero de gobierno del Banco de España Guillem López Casasnovas, que subrayó que «sería ficticio decir que todas las cajas de ahorros catalanas están sanas». Aunque para suavizar un poco sus dichos destacó que los equipos directivos de las entidades están haciendo el trabajo que les corresponde para recuperarse.
Sin embargo, hay un caso que salió a la luz, la de Caixa Catalunya, y la grave situación por la que atraviesa, que se pone de manifiesto en el informe financiero anual de 2008 remitido a la CNMV.
En él, la entidad declara una morosidad que debe provisionar por calendario rápido (créditos sin garantía, con garantía que no sea vivienda terminada o hipotecas por más del 80% del valor de tasación) de 2.708,8 millones de euros. De este importe, se estima que la caja provisionó cerca del 25% de esa mora en el primer año (2008) y que el resto debe provisionarse en 2009 y 2010. Ese 75% restante suponen 2.031 millones.
A esto hay que sumar el 25% de la nueva mora que se declare en 2009. Las propias cajas hablan de estimaciones de hasta un 9% de morosidad para el conjunto el sector. Pero la caja sólo dispone de una provisión genérica de 787 millones.
Las matemáticas son crueles: salvo que la entidad frene en seco el crecimiento de la morosidad y recupere un porcentaje de la que ya ha declarado, en 2009 no sólo se gastará toda la provisión genérica, sino que no tendrá suficientes ingresos operativos para cubrir todas las provisiones que tendrá que dotar. Lo cual le obligará a vender todo tipo de activos, e incluso podría poner en peligro sus ratios de capital.
Esta situación la pone en la mira del Banco de España, que como demostró con Caja Castilla La Mancha, no le temblará el pulso si tiene que intervenirla. Aunque preferiría optar por otras alternativas antes, claro, como fusiones o adquisiciones.
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