Fondmapfre Garantizado 807, nuevo fondo de inversion garantizado de Mapfre

 

Mapfre ha lanzado al mercado español un nuevo fondo de inversión garantizado, denominado Fondmapfre Garantizado 807, cuya rentabilidad estará vinculada a la evolución de la cotización de una cesta de tres de los mayores valores de la bolsa española: BBVA, Telefónica e Iberdrola.

Según la empresa, este nuevo fondo ofrece una oportunidad de inversión muy diversificada y con buenas expectativas de rentabilidad a medio plazo. Ayuda el hecho que los tres papeles bursátiles sean de primera categoría. Sin embargo, la bolsa española se está comportando de manera muy volátil. Y no está bien claro que camino va a seguir.

La garantía de este fondo de inversión se extiende hasta el 30 de julio de 2012, fecha en la que el partícipe recibirá el 100% de su inversión inicial y una rentabilidad del 40% si cada uno de esos tres valores han tenido una revalorización igual o superior al 15% al finalizar el período de garantía. Si esto ocurriese, tendrá una rentabilidad máxima aproximada del 10% anual.

Pero si esta condición no ocurriese al finalizar el cuarto año, se podrá obtener una rentabilidad del 10%, 20% o 30% (no acumulativas) cuando la condición de revalorización de las tres acciones respecto del valor inicial se produzca en el primer, segundo o tercer año, respectivamente.

A partir del segundo año, el fondo tiene ventanas de liquidez semestrales (de dos semanas de duración cada una de ellas), periodo en que el inversor puede disponer de su inversión a precio de mercado sin comisiones de reembolso. Eso sí, sin la garantía de recuperar toda su inversión.

Fuera de estas ventanas temporales, Mapfre informó que las comisiones de reembolso que se aplicarán en el supuesto de que el cliente desee recuperar la inversión serán decrecientes, es decir, a mayor tiempo transcurrido desde el momento de la contratación, menores comisiones. En realidad, nada nuevo, ya que la gran mayoría de los fondos tienen una política de este tipo.

Este tipo de fondos se recomiendan a partícipes muy conservadores, que no necesiten su dinero en un período de tiempo prolongado y busquen sobre todo la máxima seguridad, pero sin renunciar a la rentabilidad de la bolsa.

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